En una encuesta realizada a ciudadanos de 12 países, se encontró que los mexicanos son los menos preparados económicamente para hacer frente a situaciones que pueden cambiar la vida, como perder a un familiar, casarse, tener hijos, o tener un ahorro para una emergencia. En general no tenemos una cultura de prevención, tanto económica e incluso de salud. La mayoría vivimos al día pero cuando el mexicano tiene dinero, lo gasta de inmediato. Un claro ejemplo es el Buen Fin o Hot Sales en donde se logran cifras records en ventas porque el mexicano tiene dinero en ese momento, ya sea por reparto de utilidades o el adelanto del aguinaldo. En México, casi el *40% de la población no ahorra y si lo llega hacer es a corto plazo, y nunca pensando en inversiones o retiros. Hagamos el siguiente ejercicio. Si todos los días ahorramos un peso, al mes tendríamos $30.00 y que pasa si ese peso diario lo convertimos en $10.00 , tendríamos $300.00 al mes y al final del año serían $3,650.
La mayoría iniciamos el años con propósitos, que al fin de mes solo se quedan en propósitos. Porqué no podemos realizarnos? Acaso nuestra fuerza de voluntad no es tan grande como quisiéramos? Según investigaciones el cuerpo humano tarda entre 8 a 11 meses a que alguna actividad constante se convierta en un habito. Por eso las dietas rara ocasión funciona, porque a los 3 meses o incluso al final del mes ya queremos ver los resultados. El cambio de alimentación el cuerpo lo asimilará en un periodo largo y es por eso que en Febrero la mayoría abandonó la dieta. Dicen que árbol que nace torcido, su tronco jamás endereza. Si queremos realmente cumplir tus propósitos debemos considerar que los resultados serán a largo plazo y que solo la constancia y perseverancia lo lograrán. Así que ya sabes que las cosas no son rápidas; solo las sopas instantáneas, las pizzas y algun@s amig@s